¿Qué es el insomnio?
Se considera insomnio:
- Dificultad para conciliar el sueño (más de 30 minutos).
- Despertares frecuentes o despertar antes de lo que se quisiera.
- Sueño no reparador. Siempre y cuando exista la oportunidad y condiciones ambientales adecuadas para dormir.
Habitualmente el insomnio suele estar producido por causas externas o internas.
Entre las causas externas por problemas de insomnio están:
- Movilidad constante de turnos de trabajo, y actividad laboral nocturna.
- Realización de largos viajes con el consiguiente cambio horario, que genera dificultad para conciliar el sueño.
- Problemas de salud crónicos o puntuales.
- Una vida excesivamente sedentaria, también está entre las causas de insomnio en adultos.
- Malos hábitos diarios tanto en la alimentación desordenada, y muy abultada a últimas horas del día. Además de una falta de rutina en el horario del sueño y con cambios bruscos
- Excesiva estimulación sensorial: abuso de aparatos electrónicos, como televisión, computador, y celular. Produciendo problemas para conciliar el sueño.
- Deficiente acondicionamiento del equipo para el descanso: bases de descanso poco adecuadas o deterioradas, almohadas que impiden la adaptación del cuerpo para favorecer el descanso, ropa poco cómoda para dormir bien.
¿Cómo se diagnostica?
En general, basta con una buena entrevista y exámenes de laboratorio generales. Cuando el cuadro es muy crónico, no responde a tratamiento o existen sospechas de otros trastornos de sueño asociados, puede ser necesario realizar un estudio de sueño específico.
Polisomnografía:
Examen del sueño nocturno. Se realiza un registro simultáneo de múltiples variables corporales durante toda la noche, lo que da información global sobre el dormir y diversos trastornos del sueño como ronquidos, resistencia aumentada en la vía aérea, apneas o movimientos periódicos de extremidades.
Dormir es una necesidad vital, con la que se consigue un adecuado descanso para evitar la fatiga diurna, y el deterioro físico y mental.
Las consecuencias del insomnio, según demuestran algunas investigaciones, aumenta los factores de riesgo de padecer enfermedades cardiovasculares, diabetes o cáncer.
Por eso, si tienes problemas para conciliar el sueño, despiertas muchas veces durante la noche, no duermes las horas necesarias o estás cansado durante todo el día, debes cambiar tus hábitos diarios y nocturnos.